NewsLetter #23: La cárcel del autismo

NewsLetter #23: La cárcel del autismo

CUIDAR DIGNAMENTE nº23 –

La cárcel del autismo
Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo
 
Tanto miedo me provoca vuestro mundo, que me encierro dentro de un

«cubo invisible» para así escapar al sufrimiento… Pero, éste «Cubo» se ha

convertido en una cárcel que nubla e interfiere mi percepción, y no me

permite desempeñarme normalmente…

Anna Stutz-Berti/Le Cube de Verre

Hace pocos días se celebró el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo.

Se estima que hay más de 470.000 personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) en nuestro país y hay un millón y medio de personas vinculadas, contando también a las familias.

Nadie sabe exactamente su origen. Parece que es debido a una combinación de factores genéticos, prenatales y perinatales.

Semanas atrás hablábamos del Asperger.
El TEA incluye también otro tipo de condición conocida como autismo clásico.

Ambos comparten:

·         Dificultades para comunicarse y para las relaciones sociales.

 

El TEA es un trastorno del funcionamiento del cerebro en el que los niños no pueden desarrollar la capacidad de las habilidades sociales para entender a la otra persona y desarrollar empatía dentro de una relación.

 

·         Rigidez de pensamiento y comportamiento, que puede provocar comportamientos repetitivos (como repetir las palabras o frases una y otra vez, exactamente de la misma forma) y una grave dificultad para afrontar los cambios.

No podemos ayudar a nadie sin empatizar con su vivencia y nada ayuda más a ponerse en la piel de otro que los testimonios en primera persona.

Para entender el reto que supone la vida social para una persona con autismo, recomendamos leer esta reveladora recopilación de citas de personas afectadas (Ver enlace debajo)

Lo que para nosotros es una interacción social normal, puede resultar agresiva para ellos. Se siente extraños, casi «extraterrestres». Se refugian en la repetición y en los patrones.

Como siempre decimos en la Fundación Cuidados Dignos, a la hora de tratar a estas personas, debemos ver las dos caras de la moneda:

Conocer sus factores incapacitantes, y buscar la manera de aliviarlos o compensarlos.

En el caso del autismo, puede trabajarse desde niños con:

·         terapia del lenguaje

·         fortalecer las relaciones sociales y la empatía

·         reducir comportamientos como las conductas agresivas o repetitivas

·         mejorar el aprendizaje

·         Se pueden emplear también tratamientos farmacológicos, como la administración de oxitocina.

Pero debemos también poner atención en las capacidades y potenciarlas.

Las personas con autismo presentan diferencias con el resto de la población que, bien conducidas, pueden vivirse como talentos.

Por ejemplo, su extraordinaria atención o memoria para los detalles y la capacidad para el reconocimiento de patrones, bien gestionadas, pueden jugar a favor en su vida.

Una vez más, la clave está en conocer y manejar la diversidad humana de las personas dependientes.

Paliar las deficiencias y potenciar las capacidades, para desarrollar todo el potencial de vida y una integración óptima con el resto de la comunidad.

Un saludo
Equipo FCD

Recomendaciones:

·         40 frases de personas con autismo

·         Libro » VIAJE AL MUNDO DEL AUTISMO, de Michel Pralong»